Nuestro cuerpo necesita de forma natural ciertos metales para funcionar de manera adecuada, estos son una parte de los nutrientes que debemos consumir, los conocemos como el grupo de minerales, sin embargo, no todos los metales son benéficos para nosotros. Debido a esto la industria alimentaria necesita un detector de metales para medir los índices de concentración de estos metales pesados que son dañinos y evitar que sus productos provocan una intoxicación o diversas enfermedades en sus consumidores.
Sabemos que son diversos los grupos de nutrientes que debemos consumir y cada grupo lo encontramos en diversos alimentos, te dejamos algunos ejemplos de cada grupo:
- Hidratos de carbono: en pastas, arroz, pan, cereales, leche, frutas, papa…
- Lípidos: aceites, mantequilla, yema de huevo, pescado, leche…
- Proteínas: pescado, pollo, leche, pastas
- Vitaminas: frutas cítricas, verduras, carnes, lácteos, huevo
- Minerales: frutos secos, legumbres, vegetales, cereales, pescado, carne roja
La procedencia de cada alimento es importante, ya sea de la tierra o del mar, porque esto afecta el nivel de contaminación de metales pesados, ya que dependiendo de la forma en que fueron cultivados o procesados varían los metales tóxicos a los que están expuestos, por eso es necesario un método que se encargue de la detección de contaminantes físicos en alimentos.
¿Cómo se contaminan algunos alimentos con metales pesados?
Se ha mencionado que de manera natural nuestro cuerpo contiene ciertos metales necesarios para su adecuado funcionamiento, como hierro o zinc, pero cuando consumimos metales pesados, como el plomo o el arsénico, que han sido asimilados ya sea por vía oral, cutánea o por inhalación y estos interactúan con nuestras enzimas o con los metales que tenemos de forma natural esto causa resultados nocivos para nuestra salud.
Algunos metales pesados son el plomo, el mercurio, el arsénico, el cadmio, el níquel, aluminio y arsénico, estos pueden llegar a los alimentos de las siguientes formas:
- Por medio de fertilizantes
- Tuberías de riego viejas fabricadas con metales pesados
- Agua potable que era de consumo humano o animal que fue contaminada
- Debido al proceso de la cadena alimentaria con efecto acumulativo: 1) riego o fertilización de plantas con metales pesados, 2) estas son consumidas por animales herbívoros, 3) a su vez son consumidos por carnívoros.
Debido al alto grado de estos elementos en los alimentos, ha sido necesario que la industria alimentaria tome precauciones al respecto para evitar que los consumidores resulten dañados con productos contaminados. En Suminsa Inspection System distribuimos detectores de metal que pueden ser integrados en diferentes etapas del proceso de producción de alimentos desde la materia prima hasta el empaquetado dependiendo de la necesidad de cada empresa.
¿Qué efectos tienen los metales pesados en el cuerpo humano?
Los efectos que se presentan en los seres humanos después de haber ingerido estos metales pesados son diversas enfermedades y síntomas, algunos son vómito, diarrea, daños a diversos órganos del cuerpo como el hígado y el desarrollo de cáncer. La población más susceptible a esta intoxicación son los niños, quienes presentan bajo peso y un desarrollo negativo del cerebro.
El efecto de algunos metales pesados en nuestro cuerpo:
Cadmio
Es utilizado en pinturas, plásticos, pilas, soldaduras, fotografía, abono, farmacéutica, entre otros, como vemos se encuentra en dos fuentes indirectas que podemos ingerir, también nos podemos exponer a él por medio del agua, alimentos o inhalarlo por el humo del tabaco. En una exposición extrema provoca: anemia, disfunción renal, osteoporosis, trastornos respiratorios, hipertensión, dolor de cabeza, vértigo, alteración del sueño, pérdida de peso y apetito y cáncer entre otros.
Arsénico
Se utiliza en tratamiento de madera, en productos agrícolas como pesticidas y herbicidas, bronceadores de piel, pigmentos, medicamentos, en animales se usa como factor de crecimiento, gases venenosos de uso militar, entre otros usos. Cuando la exposición ha sido extrema se presentan síntomas como lesiones de piel y vasculares en el sistema nervioso e hígado, fiebre, arritmia cardiaca, entre otros síntomas.
Plomo
Los podemos encontrar en gasolina, baterías, latas de conserva, grifos, insecticidas, pantallas de televisión, soldaduras, entre otros usos. La absorción o consumo excesivo de este metal en los niños causa retraso mental e intelectual, muerte neonatal, y en adultos hipertensión y enfermedades cardiovasculares, esterilidad, dolor de cabeza, estreñimiento, dolor abdominal, parálisis muscular, vómito, entre otros síntomas.
Cobre
Es usado para equipo eléctrico, clavos, pernos, tuberías, utensilios de cocina, objetos decorativos, instrumentos musicales, medios de transporte, alimentos en conserva, entre otros. El derivado sulfato de cobre es utilizado en alimentos animales como pesticidas y las sales de cobre en fungicidas y alguicidas. Una exposición grave a estos elementos provoca necrosis hepática y la muerte.
Estos son algunos ejemplos de los efectos que tienen algunos metales pesados en nuestro cuerpo, por eso la industria alimentaria usa un detector de metales en sus procesos de alimentos, para que el consumidor no corra riesgos de intoxicación.
Debido a la forma en que se ha aumentado el grado de metales pesados en los alimentos, se ha incrementado la necesidad de utilizar un detector de metales en los procesamientos de estos para poder descartar los que estén contaminados y entregar al consumidor productos de calidad. Suminsa Inspection Systems es una excelente distribuidora de estos productos. Póngase en contacto con nosotros al teléfono (614) 180 3950 o envíe un correo electrónico a ventas@suminsaindustria.com para adquirir sus productos.